11. Islam Siembra en el Corazón Humano Optimismo y Esperanza

Islam quiere que la gente tenga optimismo. Allah Todopoderoso ha afirmado:

“Mi Misericordia abarca todas las cosas…” (Al-A’raf , 7:156)

El Mensajero de Allah (que Allah le bendiga y le de la paz) dijo a este respecto:

Cuando Allah Todopoderoso creó esta creación, escribió en el Libro que está encima de Su Trono: ‘Mi misericordia supera a Mi ira.’” (Bujari, Tawhid, 15)

Este hadiz es suficiente para infundir en los Musulmanes esperanza. Y es esta esperanza la que les hace desarrollar características sicológicas que favorecen en ellos el optimismo y la dulzura de carácter –el perdón, la misericordia, la paciencia, el tawakkul (confianza absoluta en Allah), la sumisión, la aceptación de todo aquello que nos sobreviene en la vida, y la buena opinión de los demás. La convicción de que todas las dificultades y enfermedades que sufren borran sus faltas y les elevan espiritualmente, hace que el Musulmán afronte la existencia con complacencia y alegría. Es imposible que un Musulmán sienta tristeza cuando ha hecho todo lo que estaba en sus manos y se ha sometido al destino, contento con el resultado que Allah decida para él. Este Musulmán vivirá, de esta manera, en un mundo de serenidad pase lo que pase.

Las puertas del arrepentimiento están siempre abiertas para los incrédulos y los transgresores hasta el último momento, sin importar la magnitud de sus faltas. Allah ha prometido perdonar a todos aquellos que se vuelvan a Él con sinceridad antes de que la muerte les sea evidente. Allah Todopoderoso ha dicho:

“Di: ¡Siervos míos que os habéis excedido con vosotros mismos, no desesperéis de la misericordia de Allah, es verdad que Allah perdona todas las faltas, pues Él es el Perdonador, el Compasivo!” (Az-Zamar,  39:53-54)

El Mensajero de Allah (que Allah le bendiga y le de la paz) prohibió atribuir mala suerte a ciertas cosas; nos ordenó, por el contrario, mirar a todo lo que nos rodea positivamente, y a interpretar los acontecimientos de la mejor manera.[1]

Islam censura que tengamos mala opinión de las personas. Antes bien, deberíamos pensar siempre bien de cuantos nos rodean. En el Noble Qur’an se dice:

“¡Vosotros que creéis! Abandonad muchas de las suposiciones. Es cierto que algunas de ellas son delito. Y no os espiéis unos a otros ni habléis mal de otros cuando no estén presentes…” (Al-Huyurat, 49:12)

Más aún, el creyente, por amor a su Señor, se acerca a Su creación con misericordia y compasión. Para ellos, toda criatura es un reflejo de su Creador y por lo tanto debe ser tratada con respeto y amor. Cada cosa que le rodea, cada acontecimiento que le sobreviene lo recibe con satisfacción, pues sabe que todo ha sido creado por Allah para guiarle al camino recto.



[1].      Bujari, Tib (Medicina) 19; Muslim, Selam (Saludos) 102; Abu Daud, Tib (Medicina) 24/3919.

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